El gobernador de Carolina del Sur desconoce esta máxima para los comunicadores
Un día, los que vivimos en Buenos Aires, nos enteramos que el gobernador de Carolina del Sur había estado en Buenos Aires visitando a una amante.
Uno de los republicanos con mejores chances de competir para las próximas presidenciales, había comunicado en una conferencia de prensa que pasó la última semana en Buenos Aires con una amiga que había conocido hace varios años a modo de despedida para “regresar” con su esposa y su familia.
La situación sorprendió a los argentinos que desconocían la situación y a sus protagonistas. Pero la situación generó un revuelo de magnitud en los Estados Unidos.
Lo más interesante para nuestro análisis es cómo el gobernador y su equipo gestionaron la comunicación.
Al principio, sus colaboradores informaron que el gobernador no estaría en funciones por una semana. Luego informaron que estaba en un retiro en los montes Apalaches. Su esposa desconocía donde estaba su esposo ya que sus hijos y ella –a la espera de su esposo- estaban de vacaciones. Ella comentó esta situación en los medios ya que hacía varios días que desconocía donde estaba su esposo.
Luego, la bomba. El gobernador regresa y cuenta que se fue a Buenos Aires –una ciudad exótica, según sus palabras…- para despedirse de su amada amante.
Una semana de incertidumbre para Carolina del Sur, para su familia y luego la verdad. Detrás de una historia ideal para los medios, una estrategia de comunicación desastrosa. Una semana generando incertidumbre con un final de película de terror y una carrera, seguramente, truncada
LAS MALAS NOTICIAS, EN UNA SOLA VEZ. LAS BUENAS, EN FORMA PROGRESIVA - Maquiavelo dixit
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