UNA CRISIS SE TRANSFORMA EN UNA GRAN OPORTUNIDAD DE PR. El caso Alamo Drafthouse demuestra que con valores las marcas pueden enfrentar crisis y aprove


Alamo Drafthose es una complejo de cines en Texas que tiene una costumbre muy particular en los tiempos que corren: Tolerancia cero para los que hablan y usan el teléfono. La cosa es así: si querés ir al cine y que nadie te moleste hablando, éste es el lugar. Pero si no podés aguantar la tentación de hablar o usar tu celular, incluido los SMS, no vayas.

Pero parece ser que una espectadora insistió en enviar mensajes de texto en plena proyección y luego que el equipo del cine le advirtiera dos veces, la echó sin devolverle el importe de la entrada.

¿Cómo reaccionó la expulsada? Dejando un mensaje en el contestador de las oficinas de Alamo indicando que la empresa era “una pequeña sala de mierda” acusando al cine de intolerables. Frente a eso Drafthouse elaboró un video con ese mensaje que ya superó el millón y media de views en YouTube: http://www.youtube.com/watch?v=1L3eeC2lJZs

Con más de 500 comentarios, en su mayoría a favor pero varios en contra. Pero la cosa no terminó ahí. El presentador más importante de CNN, Anderson Cooper, indicó que el dueño de Drafthouse debería recibir el “premio Nobel de la paz” poniéndolo al tope de las listas de temas en internet

Una crisis que se transformó en una oportunidad –algo peligrosa-. Esta situación fue considerada una buena forma de resaltar los valores de la empresa –al máximo posible-, cosa que es vital en una crisis. Y en este caso, utilizada en forma inteligente para salir del problema y al mismo tiempo mostrar lo que verdaderamente piensa la empresa. De crisis a brand PR en un solo paso.

Interesante. Qué opinas?

EL CASO SCHWARZENEGGER. Nuevamente una figura pública pone en riesgo su reputación. ¿Podrá el actor sobrevivir al error de la persona?


No es el primero ni será el único. De Clinton a Tiger y ahora el actor de Terminator y ex Gobernador del Estado de California.

Mucho se habló del tema, pero poco sobre el daño que su accionar puede causar en su reputación de actor -como en este artículo de Fox News-.

Por lo visto, Arnold eligió enfrentar el tema como corresponde. Reconocer la situación, parar sus proyectos cinematográficos y dedicar todo su tiempo a resolver sus problemas personales incluyendo recomponer su relación con sus hijos luego de lo sucedido. Está haciendo lo que todo el mundo espera. Cometió un error, pero está dando señales de enfrentar la situación. Y el público percibe este tipo de comportamiento.

No sabemos si sus películas serán exitosas, pero parece que ha elegido el camino adecuado para recomponer su imagen dañada y eso es el clave para que el actor sobreviva.

¿ESTAN PREPARADAS LAS COMPAÑÍAS CUANDO ES UN COMPETIDOR QUIEN TIENE UNA CRISIS? PARA REFLEXIONAR.

Muchas compañías focalizan su preparación para situaciones de crisis cuando se trata de situaciones en las cuáles son protagonistas. Pero, ¿qué pasa si un competidor tiene una crisis?

En líneas generales, puede pensarse que eso puede beneficiar a la empresa. Puede ser. Pero también puede ser el inicio de una crisis propia.

¿Qué pasa si se descubre que un alimento producido por un competidor está contaminado?

Puede suceder que nuestra empresa logre vender más o que los medios y los consumidores pongan el foco en la forma que la industria produce los alimentos y eso puede afectarnos si no estamos bien preparados.

Cuando en Argentina se comenzó a difundir la noticia que existían talleres de confección que contrataban personas casi en situación de esclavitud para confeccionar prendas de vestir, los medios y la opinión pública puso en manto de duda sobre todo el sector. Y fue muy difícil establecer con precisión qué marcas estaban o no involucradas. Aquellas que tenían procedimientos controlados, tuvieron que salir a dar explicaciones para evitar daños a su reputación.

Los casos recientes de robo de datos personales en servicios prestados por marcas de reconocido prestigio, ha generado dudas en todas las compañías que manejan este tipo de información y no sólo en las afectadas.

Una verdadera preparación implica analizar todos los riesgos posibles y uno de ellos corresponde a las crisis de competidores. Estar bien preparados reduce los riesgos y, al mismo tiempo, puede transformarse en una verdadera ventaja competitiva.

Es simple, uno puede estar en la misma bolsa de quien tuvo la crisis o ser la empresa que está mejor preparada en su industria y con una comunicación y comportamiento adecuado, ser considerado un líder verdadero.
Qué opinás al respecto?

LECTURA RECOMENDADA: Un caso de crisis que enseña mucho. Columna de Jorge Castañeda sobre el caso Strauss-Kahn, publicado en Reforma de México.


Es uno de los casos más resonantes y esta columna de Jorge Castañeda publicada en Reforma de México nos permite reflexionar sobre la importancia de la reputación en un caso de crisis y sobre el efecto que puede tener la comunicación en la opinión pública.


Strauss-Kahn
Jorge G. Castañeda
Reforma
19/05/2011

Habrá menciones y moralejas sobre la desgracia de Dominique Strauss-Kahn durante meses o años. No podemos siquiera especular sobre qué pasó, por qué, y hasta dónde llegará el aparente derrumbe sin fin de uno de los políticos franceses de mayor talento nacional e internacional de los últimos años. Tres reflexiones iniciales tomadas de lugares comunes, quizás interesantes, vienen a la mente.



Primero, ningún desenlace político es seguro. Strauss-Kahn parecía estar a punto de renunciar al FMI, a principios de junio, para volver a Francia y lanzar su candidatura a la Presidencia. Tenía primero que participar en las primarias del Partido Socialista para después competir probablemente contra el actual presidente Nicolas Sarkozy, la carismática dirigente de extrema derecha Marine Le Pen, y quizás algún otro candidato. Todas las encuestas le daban hoy, a un año de las elecciones, ventaja considerable sobre sus rivales. Se ve a estas alturas imposible siquiera que pueda ser el candidato del Partido Socialista. Algo que parecía completamente amarrado, probablemente hoy quedó descartado para siempre. Que quede claro que en política todo puede suceder por patología, error, soberbia, o por las trampas que le pone a uno el destino o el enemigo.



La segunda reflexión tiene que ver con el famoso sempiterno problema de diferenciar lo público y lo privado. A diferencia de Schwarzenegger, Alan García, Tiger Woods o Alejandro Toledo con sus noviazgos y romances, Strauss-Kahn no es acusado de "infidelidad", sino de un delito. Puede ser procesado por intento de violación, privación de la libertad y otros cinco cargos. Efectivamente, no es lo mismo. El problema es que está siendo juzgado en la opinión pública -antes de siquiera llegar a la acusación formal de un gran jurado de Nueva York- por faltas a la moral del pasado que le dan credibilidad y precio a la presunción de culpa sobre un delito actual. Y se trata de un delito y de un caso, a menos de que existan videos del hotel donde aconteció, donde no existen más pruebas que el testimonio de una y de otro. Las supuestas pruebas de ADN no son prueba en este caso: pudo haber sexo entre Strauss-Kahn y la recamarera del hotel sin que por ello hubiera habido violación; y puede haber rasguños y otras heridas infligidas por uno a la otra o la otra al uno, sin que tampoco implique violación. Al final del día todo dependerá de la credibilidad de la recamarera y del propio Strauss-Kahn. Pero como ya se ha visto, la credibilidad del ex ministro francés está por los suelos, porque parece que se produjeron casos análogos, aunque no idénticos, en etapas previas de su vida. Lo que está en juego no es sólo el delito, sino también la credibilidad de los dos personajes involucrados, y esa credibilidad o falta de ella se origina en la vida privada del acusado.



Por último, la posible trampa. No creo que a nadie le resulte ajena la posibilidad de que, por un lado, Strauss-Kahn pueda haber cometido ese delito; y que Sarkozy pueda haber tendido una trampa, a sabiendas de que probablemente caería. Las trampas que se montan son las que tienen buenas probabilidades de prosperar; la inverosimilitud de un cargo depende efectivamente de la historia personal y jurídica del personaje. A otras figuras no le montarían una trampa así porque no funcionaría; si le pusieron un cuatro, éste era el que había que ponerle. Sabremos en los próximos días en el juicio si fue cuatro, dos adultos realizando un acto sexual consensual, o uno violando a otra, o una combinación de las tres cosas. Por lo pronto, lo que sabemos es que, lo que antes solía suceder en los hoteles de los países socialistas -Rossiya en Moscú, La Habana Libre en La Habana y sus similares en Varsovia, Praga, Budapest o Berlín Oriental- ya también pasa en los lujosos hoteles de Nueva York. Parafraseando a Ingrid Betancourt "what happens in the urban jungle, does not stay in the urban jungle".



@JorgeGCastaneda